Internet proporciona prácticamente el mismo punto de partida para todas las empresas, aunque por esta razón el grado de competitividad para obtener los mejores puestos en los resultados de búsqueda aumenta continua y exponencialmente. Debido a este crecimiento, la eficacia de los algoritmos utilizados por los buscadores relacionan sus resultados con una premisa: el usuario debe llegar a encontrar lo que busca, en el menor tiempo, con el menor esfuerzo y con el mínimo consumo de sus recursos posible.